Recientemente, Google ha decidido ajustar sus políticas relacionadas con los anuncios de afiliados en las extensiones de Chrome. Este cambio se produce en medio de las controversias en torno a Honey, una popular extensión de navegador adquirida por PayPal, que fue acusada de manipular enlaces de afiliados de manera poco ética. Según informes, Honey habría estado redirigiendo los enlaces de afiliados de los influencers que pagaba, lo que generó un fuerte debate sobre la transparencia y la ética en la publicidad digital.
Con la nueva normativa, Google establece que los enlaces, códigos y cookies de afiliados solo pueden ser utilizados si la extensión proporciona un beneficio directo y claro al usuario, relacionado con su funcionalidad principal. Esto significa que no se permitirá inyectar enlaces de afiliados sin que haya una acción previa del usuario que justifique su uso. ¿Te imaginas recibir una oferta o un descuento sin haberlo solicitado? Ya no será tan sencillo.
Entre las infracciones más comunes identificadas por Google se encuentran:
1. La inserción de enlaces de afiliados sin ofrecer un descuento, reembolso o donación en el proceso.
2. La práctica de inyectar enlaces de afiliados de forma continua en segundo plano, sin que el usuario interactúe de manera activa.
Estas nuevas directrices están diseñadas para proteger a los usuarios de prácticas engañosas y asegurar que las extensiones sean verdaderamente útiles. La controversia en torno a Honey ha llevado a una mayor vigilancia sobre cómo se manejan los enlaces de afiliados en el ecosistema de extensiones de Chrome.
A pesar de los cambios, tanto Google como PayPal no han emitido comentarios oficiales sobre esta situación. Sin embargo, la comunidad de usuarios y creadores de contenido sigue de cerca el desarrollo de este tema, especialmente tras la viralidad de un video del YouTuber MegaLag, que ha acumulado más de 17 millones de visualizaciones y que expone las prácticas de Honey. Además, hay rumores sobre una segunda parte del video que podría revelar más detalles intrigantes.
La situación se complica aún más con la demanda presentada por otro YouTuber, Legal Eagle, quien ha llevado a PayPal a los tribunales por las prácticas de afiliación de Honey. Estos eventos destacan no solo la importancia de la regulación en el ámbito digital, sino también el poder de la comunidad en la denuncia de comportamientos poco éticos.