En Sevilla, un grupo creciente de ciudadanos ha caído en una trampa digital que utiliza WhatsApp como herramienta principal. Los hackers han desarrollado una estrategia astuta que comienza con la suplantación de identidad, utilizando mensajes que generan confianza entre amigos y familiares. Con un simple ‘Tío, necesito un favor’, se abre la puerta a una serie de solicitudes de Bizum que pueden llegar hasta los 500 euros.
Las tácticas de los estafadores son tan simples como efectivas. En los últimos días, muchos sevillanos, incluidos periodistas y miembros de diferentes hermandades, han reportado que sus cuentas de WhatsApp han sido hackeadas. La metodología del fraude es alarmantemente directa: el delincuente se hace pasar por una persona conocida y solicita un código de verificación, alegando tener problemas con su móvil.
Esto, según las víctimas, hace que sea fácil caer en la trampa, ya que el mensaje proviene de un contacto de confianza, lo que añade un nivel de legitimidad al engaño.
Un efecto dominó de estafas
Una vez que los hackers obtienen acceso a la cuenta, comienzan a contactar con los amigos y familiares de la víctima. Bajo pretextos de emergencia financiera, solicitan Bizum o transferencias, logrando engañar a más personas. Un afectado relata cómo tres de sus contactos cayeron en la trampa, cada uno enviando 500 euros, mientras que otros también sufrieron la pérdida de sus cuentas.
Esta técnica de estafa en cadena ha sido un problema creciente, ya que los delincuentes se aprovechan de la confianza que existe entre los usuarios de WhatsApp.
Recuperando la cuenta hackeada
A pesar de que algunos han decidido interponer denuncias ante la Policía Nacional, las opciones para recuperar la cuenta son limitadas. Según los testimonios, WhatsApp no proporciona muchas soluciones y los expertos señalan que es crucial intentar acceder a la verificación nuevamente después de 24 horas, ya que los estafadores suelen quemar los códigos repetidamente para evitar que el usuario legítimo recupere su cuenta.
El tiempo estimado para recuperar la cuenta puede ser de alrededor de un día, pero las dificultades son evidentes debido a las medidas de seguridad de la plataforma.
La preocupación por el número de víctimas es creciente, ya que no todos han decidido denunciar; esto significa que la cifra real de afectados podría ser mucho mayor. La Policía Nacional y la Guardia Civil han intensificado sus esfuerzos para advertir a la población sobre estos riesgos, enfatizando la importancia de no compartir códigos de verificación y de activar la verificación en dos pasos en WhatsApp como medidas preventivas.
Consejos para evitar caer en la trampa
Los expertos en ciberseguridad ofrecen varias recomendaciones para protegerse de este tipo de fraudes. Mantener una comunicación clara con los contactos y verificar cualquier solicitud inusual son pasos clave para evitar ser víctima de este tipo de estafas. Además, se recomienda estar siempre atento a los mensajes sospechosos y no dudar en confirmar con la persona involucrada antes de realizar cualquier transferencia de dinero.